Se estima que existen 736 mil hectáreas de alcornocales en Portugal, lo que corresponde al 23% del bosque nacional. Aproximadamente un tercio de los alcornoques de todo el mundo se encuentran en Portugal.
El alcornoque o cómo fue clasificado en el siglo XVIII por Carolus Linnaeus, «Quercus suber», es un árbol muy antiguo que ha existido por 30 millones de años en el área mediterránea y en mayor número en Portugal. Es un árbol muy especial.
Producto natural al que se le asocian atributos extensos. El corcho es la corteza que se forma en el alcornoque. Se presenta en forma de tejido de aspecto alveolar, compuesta por una matriz de las células del parénquima.
Como resultado de su formación, el alcornoque es único en el mundo por su intenso polimorfismo. Por tener una gran capacidad regeneradora en su tela protectora, estructura y composición; el corcho, contiene propiedades físicas, mecánicas y químicas inmejorables.
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